viernes, 23 de enero de 2009

En lugar de prohibir... únete a ellos

A veces en lugar de prohibir algo, resulta más productivo permitirlo de manera controlada.

El otro día visitando una galería alternativa, hice una pausa para pasarme por los servicios. Y en esos servicios modernos (unisex) me encontré primero un extraño recipiente al lado del inodoro.

Sí, no son colillas ni cigarrillos, son tizas. Y ¿para qué? Para permitir que aquellos que no pueden sentarse sin pintarrajear en las paredes puedan hacerlo cómodamente, pero sólo en una parte de los servicios. He aquí una muestra

Ningún pensamiento muy profundo, pero la cuestión es que el resto del espacio estaba desprovisto de pintadas. Bien es cierto que esto puede ser que sea muy reciente o que las personas que visitan esa galería son muy limpios y civilizados, pero da la impresión de que estimulando a que la gente escriba en una pizarra se consigue que no escriban en el resto (y por supuesto, cada cierto tiempo alguien debe de limpiarlo). Aunque posiblemente eso conlleve algo más de uso de papel higiénico...

Y por supuesto, da para incontables películas de espías que se intercambian mensajes privados de una manera anónima...

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