Resulta que ahora es la NYC Restaurant week, que sigue la tradición de otros sitios, y es una semana de 19 días.
No es del todo parecida a la Madrid Restaurant week, ya que aquí la oferta es de menús a precios fijos y relativamente asequibles (para lo que son los restaurantes participantes). El caso es que estando aquí, no era cuestión de desaprovecharlo, por ejemplo en el restaurante Smith & Wollensky.
Este es un restaurante de lujo de los que priman la calidad y la cantidad sobre la sofisticación. Por ejemplo, veamos un primero: Calamari.
Y un segundo: Filet Mignon de 10oz (280 gramos).
Simple sencillo, abundante... No es extraño que por tanto el segundo hombre más rico del mundo (por ahora), que gusta de los chuletones y la hamburguesas, elija este sitio para comer cuando subasta la posibilidad de un almuerzo con él.
Gracias a que el restaurante pone plaquitas con los nombres de sus clientes famosos, me pude dar cuenta que justo en la mesa de al lado es dónde habitualmente sucede este almuerzo.
Y la plaquita en cuestión.
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