En mis últimas vacaciones estábamos usando un navegador GPS para ayudarnos en el viaje, cuando de repente, a las 12 de la noche, el navegador nos dice que cojamos un desvío a la derecha.
No parecía el camino, pero era tarde y pensé "será un atajo" y seguí sus direcciones. Después de 500 m de un camino abandonado, llegamos a un sitio absolutamente solitario y sin iluminar al lado de un cementerio, y va el navegador y dice: "ahora, coja el ferry". En ese momento nos miramos, nos echamos unas risas y volvimos a la autovía. Pero no dejaba de ser siniestro.
En un caso de que la ficción supera la realidad, uno de mis Internet comics favoritos ha publicado hoy este chiste:
En nuestro caso, no llegamos a saber si después del ferry habría que luchar con lobos espectrales... el navegador volvió a la normalidad poco después de volver a la autovía.
(el autor me deja enlazar a su imagen... potencia de las licencias CC)
No hay comentarios:
Publicar un comentario