Este invierno, por Madrid, una agencia turística y Nueva York (sí, su propio ayuntamiento también hace publicidad como nosotros), nos invitan a escapar de nuestros cuatro rascacielos para ver los suyos.
Pero qué casualidad, que nada más llegar allí, Madrid pone publicidad para que nos volvamos...
Y como en la publicidad de Madrid no dice exactamente cómo, pues una compañía aérea nos ofrece vuelos baratos e insinúa que aquí hay tantas plantas que tenemos que colgarlas en los aviones porque ya no nos caben en las terrazas (está un poco sucio el cartel, pero es que Nueva York tiene pintadas en algunos sitios, como ya veremos).
Sin embargo, a pesar de todo las ciudades no son iguales. Ellos tienen unicornios... bueno, al menos los tenían.
La pobre estaba un poco asustada, pero gracias a una azafata muy simpática conseguí que volviese conmigo... así que ahora también nosotros tenemos unicornio.
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